La Guerra de Troya fue desencadenada por el premio a la Manzana de Oro, conocida a posteriori, como la Manzana de la Discordia. La cual sería entregada a la Diosa más hermosa, al no haber consenso, Zeus encomendó la tarea a París el hijo del Rey de Troya.

La elección estaba entre Hera, la diosa del matrimonio y el hogar, Atenea, diosa de la sabiduría y el ingenio en las batallas, y Afrodita, la diosa de la belleza y el amor, siendo ésta última la elegida, se dice que ésta recibió el premio en un lugar cuyas características se asemejan al Jardín del Edén.

Afrodita -Venus, representan las elecciones que tomamos en nuestra vida en base a nuestras relaciones, es la musa que inspira tanto a hombres como mujeres, a través de ella nos nutrimos, florecemos, crecemos, nos inspira a crear. Es la generosidad, el compartir, el disfrutar, sin llegar a desgastarnos es el proceso, es la alegría que procede del espíritu, no como sacrificio o sumisión.

Venimos al mundo a través de la mujer, las mujeres son grandes maestras, las mujeres son grandes colaboradoras, también representan grandes desafíos, hasta que no se integre y se respete está energía, la humanidad seguirá estando bajo el sufrimiento y el dolor, seguiremos haciéndonos daño a nosotros mismos.